Enigmático,
misterioso y tal vez un poco tonto así lo describió ella la primera vez que lo
vio: , su cabello con un peinado extraño,
tus comentarios raros y la adicción por tu reproductor y tus audífonos
eran únicas, te mire como otro ente más del espacio, con tus palabras dichas a
tan alto volumen quizás en algún momento llamaron mi atención, y me concentre
en tu aspecto desgastado como un joven cualquiera, voz de un adulto prematuro,
ojos marrón, sonrisa perfecta, un ligero complejo de voz acentuada practicando
un español fuerte; sentado frente a mi, estabas en un auditorio gigante una
obsesión por hacerte escuchar y tus audífonos a estallar por todo el sonido que
descargaban, recuerdo que escuchabas mientras hablabas un rock industrial muy
propio de tu gusto, seguía mirándote
como cualquier otro ente del auditorio con la misma atención que le prestaría a
cualquier hablante no me intereso tal vez tus ganas de llamar la atención de
todos o de que tu aspecto se hiciera notar, eras tan normal a mi vista, pero
quizás te mire deprisa, quizás ni siquiera me fije en tu sonrisa, quizás ni
detalle los ojos y fue días después en situaciones graciosas que te volví a
encontrar, un día que hasta confundí tu nombre después que nuestra presentación
fue oficial, y lo arregle con una de mis tantas sonrisas, lo único que hiciste
fue reír, fue un gran error para mi, para ti solo una manera de hacerte feliz deleitándote
con mi timidez.
Pasaron
los días y fue más sencillo, el se fue envainando en los ojos de diamante de
ella, y a ser seducido por el dulce jugueteo constante de entre sus labios, su
cabello y sus manos, ella era como una muñeca italiana, era una perfecta
doncella digna de una hermosa y tierna admiración y el la veía con cierto
delirio de lobo feroz la sentía dentro de su ser con deseo, y deseaba quererla
hasta el fin de los tiempos, pero para ella solo era uno más de sus tantos
compañeros. Para ella era sencillo reír, y amaba hacerlo, el aprovechaba su
sentido del humor para lograrlo y en poco tiempo y entre detalles conquistó a
aquella tierna princesa.
No
fue mucho lo que demoró sus ganas de hacerla suya, de marcar su territorio ante
otros.
Ella
era efímera y perfecta, su apariencia era comparada a la de una pequeña
mariposa que rondaba entre flores, pero se encontraba encerrada entre los
brazos de aquel desconocido que la había atado, ella amaba su libertad pero el
amaba tenerla junto a el como en una jaula, para ella esto era devastador y un
día sin temor corto sus alas de su destripador, el loco joven No lo entendió y
entre llamadas y desesperación, la
enloqueció, la hizo perder la cordura y la poca razón, dentro de sus signos de
alarma el buscaba que ella lo mirará, y si quisiera lo humillará, el la hizo un
objeto de sedición y ella logro caer ante aquella maldición, perdiendo el
sentido y el corazón, un día de tantos
dentro de su constante perdición y acosada por el destripador calló por las
escaleras muriendo ahogada en su sangre y lágrimas, al ver esto tal era la
obsesión de su destripador que continuó a esto y dejando una nota también se mató,
la nota en que en su tumba fue puesta decía: "te seguiré hasta en la
muerte mi querida mariposa, y hasta el fin de los días" y así termino su
historia trágica de amor.
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